El 2023 fue un gran año para las alternativas renovables, principalmente para la energía eólica, que logró superar al gas en la producción de electricidad en todo Europa. El dato fue proporcionado por un informe anual de Ember, una entidad conformada por un grupo de expertos. Esto implica un descenso en las emisiones de combustibles fósiles.
Según la organización, la energía eólica y solar generaron un 27% de la electricidad total del viejo continente durante todo el año pasado. Esta cifra es un récord para las alternativas renovables. Lo más esperanzador es que los países siguen apostando por el lanzamiento de parques, lo que deriva en un aumento de la capacidad instalada.
Qué ocurrió en Europa con la energía eólica
El carbón y el gas, dos de las fuentes más utilizadas para producir electricidad, registraron un descenso considerable. Esto es positivo porque implica una menor emisión de carbono a la atmósfera. De hecho, el primero de ellos únicamente representó el 12% de la generación total, lo que representa su mínimo histórico.
“Los combustibles fósiles están desempeñando un papel menor que nunca como un sistema con energía eólica y solar como columna vertebral”, declaró Sarah Brown, directora del programa para Europa de la entidad. Además, calificaron como un “colapso sin precedentes” al descenso de la generación de gas y carbón, algo que fue incrementado por una disminución de la demanda de electricidad.
En la Unión Europea (UE), la generación eólica aumentó un 13%, alcanzando 476 TWh, lo que es equivalente a toda la demanda eléctrica de Francia. Esto implica el 18% de la combinación energética de la región durante el 2023. El gas, por su parte, estuvo un punto porcentual por debajo, con el 17%. La alternativa solar produjo el 9% de la electricidad.
En base a esto, se estimó que las alternativas renovables incrementaron su participación a un 44% de la energía de toda la UE en 2023, lo que también es una cifra récord. A su vez, las fuentes hidroeléctricas lograron volver a números positivos luego de un 2022 en el que estuvieron por debajo de lo habitual.
Los países que más contribuyeron a que esto ocurra
Alemania, Dinamarca y Suecia son los tres principales responsables de que esto sucediera. El primero de ellos, genera la mayor cantidad de energía eólica; el segundo, consiguió que el 58% de su electricidad provenga de aerogeneradores; mientras que el tercero es el que más produce por habitante.
Finalmente, Pieter de Pous, líder del programa, se mostró muy contento por lo conseguido: “La UE está logrando avances muy significativos en el país para pasar a un sistema energético libre de fósiles con energías renovables baratas que eliminarían la demanda de carbón y gas de forma permanente”.
