Más allá de que la mayoría de los países están apostando por la energía eólica o la solar como sus principales fuentes renovables para acelerar la transición eléctrica, la biomasa también ofrece varios beneficios para reducir la contaminación, satisfacer las necesidades de la población y mantener una buena relación entre la cantidad que se produce y lo que cuesta hacerlo.
Además, apostar por la biomasa no significa dejar de lado otras alternativas, ya que no se trata de una alternativa que sea muy demandante en cuanto a sus instalaciones, como sí puede suceder con la nuclear, que requiere de inversiones multimillonarias y de varios años de construcción para garantizar una generación sin riesgos y que cumpla con los requisitos de seguridad para evitar catástrofes.
Por qué la biomasa es un negocio en crecimiento
En base a este panorama, muchas compañías, organizaciones y gobiernos están apostando por incrementar sus esfuerzos con respecto a esta alternativa. De hecho, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), remarcó que uno de sus objetivos más importantes es ampliar su mercado de productos que estén basados en biomasa.
Este apartado incluye también a los biocombustibles (se espera que se convierta en un elemento vital en la lucha contra el cambio climático y los combustibles fósiles), los bioplásticos e incluso los muebles. Por este motivo, también aconsejan a su propio gobierno incrementar sus esfuerzos para fomentar una mayor producción de todos los objetos mencionados.
Según detallaron, encontraron una oportunidad de oro para ampliar los mercados, introduciendo productos con biomasa y mejorando la situación de sus productores, ya que podrán incrementar sus ingresos, en especial los propietarios de los bosques, los agricultores y los ganaderos.
Qué dice el informe del USDA sobre la biomasa
Tom Vilsack, secretario de Agricultura, reveló la importancia que tiene esta fuente en una reunión de la entidad. Alí declaró que «la creciente demanda de biomasa es una oportunidad de oro para expandir los mercados y crear nuevos ingresos para los productores rurales».
“Esta hoja de ruta integral fortalecerá nuestros sistemas de producción y preprocesamiento para brindar incentivos a los productores y fabricantes, de modo que la biomasa pueda usarse para impulsar la bioeconomía estadounidense”, indicó en una presentación que también incluyó un pedido para acelerar los esfuerzos para investigar los mercados.
De dónde se obtiene la biomasa
Uno de los apartados principales del informe que le entregaron al presidente de Estados Unidos es que esta fuente se obtiene a partir de los cultivos, los residuos agrícolas y alimentarios, de la ganadería y de los bosques. Es por eso que encuentran un negocio en crecimiento que se puede aprovechar mucho más para combatir el cambio climático.
“Es la base de miles de productos biobasados que encontramos todos los días, como muebles, materiales de construcción, bioplásticos, productos de papel, ropa y biocombustibles. Se espera que la demanda de biomasa aumente con el tiempo para su uso en soluciones climáticamente inteligentes y sostenibles para abordar las necesidades de la sociedad”, añadieron.
La relación de la biomasa con el campo
Una de sus conclusiones principales es que se pueden utilizar a los cultivos emergentes, en especial los que provienen de las oleaginosas (Estados Unidos es uno de los tres principales productores de soja a nivel mundial y hoy logra superar a Argentina en cantidades de generación) para incrementar la disponibilidad de la biomasa y garantizar la sostenibilidad en el trabajo en los campos.
Esto se debe a que se incrementa la producción de los cultivos básicos sin la necesidad de aumentar el uso de la tierra, aunque para esto se necesita de técnicas como las de cobertura o doble cultivo. “Se podrían utilizar incentivos y opciones de reducción de riesgos para promover la expansión de cultivos menos conocidos, como la camelina, la pennycress y la carinata, junto con la investigación que reduce su riesgo agronómico y económico”, remarcan.
La sostenibilidad ambiental
Este es uno de los propósitos principales de la bioeconomía, ya que se requiere de la sustitución de los recursos no renovables por aquellos que sí lo son. Y es aquí donde la biomasa se convierte en un negocio en ascenso, ya que se trata de una materia que logra realizar este cambio que es vital para los procesos de sustentabilidad.
“Mejorar la cadena de suministro de biomasa contribuye así a una amplia gama de objetivos de sostenibilidad ambiental, como la agricultura climáticamente inteligente, la agricultura regenerativa y la sustitución del uso de combustibles fósiles”, remarcaron desde el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.
Los problemas actuales que enfrenta la industria de la biomasa
Más allá de que se trate de un negocio en crecimiento, todavía existen varias barreras que impiden que la producción de esta fuente renovable logre dar el siguiente paso necesario para consolidarse como una realidad, al menos en Estados Unidos, que es el país de estudio del informe realizado por la entidad.
De hecho, allí se han identificado varios impedimentos que frenan su generación, como es el caso de la escasez de mercados establecidos para los cultivos. En base a esto, recomiendan que se haga una investigación profunda de la situación, incluyendo la disponibilidad de los productos de biomasa y que se dicten programas de capacitación para capacitar a los trabajadores en esta materia.
Entre los ítems del estudio, se menciona la necesidad de “innovar y expandir la producción, el preprocesamiento y la demanda de biomasa apoya la seguridad alimentaria al diversificar y aumentar los flujos de ingresos para los productores de alimentos sin retirar tierras de cultivo de la producción de alimentos, al tiempo que reduce el costo de la protección y las enmiendas del suelo”.
Finalmente, cabe destacar que la biomasa ha logrado aumentar su influencia en Estados Unidos en más del doble desde el 2016, lo que demuestra que se trata de un negocio en crecimiento. De todas formas, todavía se siguen requiriendo de inversiones para aumentar su producción y popularizar su uso.
