En 2023, China realizó una inversión de más de 130 mil millones de dólares para adquirir infraestructura, construir establecimientos e impulsar la industria solar. Esto lo convertirá ampliamente en el país que más producirá este tipo de energía renovable en el mundo, al menos hasta 2026.
De acuerdo a datos de la consultora Wood Mackenzie, China tendrá más del 80% de la capacidad global de fabricación de toda la cadena de suministro que permite generar energía solar. Todo esto hará que se consolide cómodamente en la primera posición, muy alejada de cualquier otra nación.
En qué consiste la propuesta de China
Como parte de una iniciativa para un futuro más sostenible, alejándose de los métodos enérgicos tradicionales, que son altamente contaminantes y perjudican al medio ambiente, el país asiático adoptó una serie de políticas que favorecen las alternativas renovables, como la solar, a través de subsidios para adquirir paneles.
De hecho, un informe de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) detalló que China terminará de adquirir 120 GW de capacidad solar fotovoltaica en 2023, lo que equivale al 50% del crecimiento de todo el mundo. Esto, sumado a otros factores como módulos y obleas, se traduce a que tenga la potencia instalada para satisfacer la demanda mundial.
En comparación con otros países, mientras que China añadirá más de un Teravatio (TW) de capacidad de módulos, obleas y células para que entren en funcionamiento en 2024, China y Estados Unidos, el año pasado, tenían 200 gigavatios (GW), lo que equivale a una diferencia de 800 GW.
La explicación de Wood Mackenzie
En el estudio de la entidad, Huaiyan Sun, consultor de la compañía, sintetizó en qué consistió la iniciativa: “La expansión de la fabricación solar en China ha sido impulsada por altos márgenes para el polisilicio, las actualizaciones tecnológicas y el desarrollo de la fabricación local en los mercados extranjeros”,
Sobre el futuro de este tipo de energía y la consolidación del país asiático como líder mundial, el experto sostuvo que “China seguirá dominando la cadena de suministro solar global y continuará ampliando la brecha tecnológica y de costos con los competidores”.
Uno de los hechos más importantes que sostienen su opinión consiste en su infraestructura: “A pesar de los considerables planes de expansión de módulos, los mercados extranjeros todavía no pueden eliminar su dependencia de China para las obleas y las células en los próximos tres años”.
De todas maneras, como hay una amplia variedad de oferta, no todo el sector está transitando por una gran etapa. Así lo explicó Sun: “El exceso de oferta obstaculizará algunos de los planes de expansión actuales. En los últimos tres meses se han cancelado o suspendido más de 70 GW de capacidad en China”.