Desde la Base Marambio, sede Argentina en la Antártida, el Presidente se reunió con representantes del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) para dar inicio a una actividad que utilizará energía nuclear con el objetivo de controlar la emisión de plásticos en el continente. El objetivo es reducir la contaminación.
El dirigente viajó a la Base Antártica Conjunta Marambio en compañía de Rafael Grossi, titular de la OIEA, Rafael Grossi. La finalidad es poner en marcha el programa Nutec Plastics en Argentina, algo que realizaron varios países del mundo con el objetivo de estudiar la contaminación marina a través de la emisión de plásticos.
En qué consiste el acuerdo de Argentina con la OIEA
Nutec Plastics posee la colaboración de 63 naciones que se encargan de monitorizar la contaminación marina. Además, 30 de ellos se hallan desarrollando tecnologías innovadoras que permitirán realizar un reciclaje mucho más eficiente. Entre estos procedimientos se encuentra la irradiación del plástico existente y así volverlo apto para ser reutilizado.
“A través de este programa, Argentina comenzará un nuevo capítulo en su larga y distinguida trayectoria en materia de ciencia antártica. Mediante acuerdos de cooperación internacional, buscamos potenciar nuestras capacidades para poder brindar información científica de calidad para la toma de decisiones en el marco del Tratado Antártico”, expresó el Presidente.
A partir de este convenio, en base a la información oficial, el Gobierno se compromete a enviar a dos grupos científicos a trabajar en el continente blanco durante 60 y 120 días, en un trabajo que estará coordinado con el ministerio de Defensa. Aquí se encargarán de llevar a cabo una serie de investigaciones sobre la energía nuclear y la problemática.
A su vez, el Instituto Antártico Argentino tomará muestras y realizará análisis sobre los resultados obtenidos. Mientras tanto, la OIEA apoyará su trabajo, proveerá insumos, equipos de laboratorio específicos para su labor y la zona, además de financiar las capacitaciones de los científicos que deberán reorientar sus habilidades a un contexto distinto.
La importancia del acuerdo
“Es un viaje que tiene un carácter pionero porque es la primera vez que el Organismo Internacional de Energía Atómica inicia una misión de carácter científico en el continente antártico en torno a una problemática global, que es muy grave, como ocurre con la presencia de microplásticos y plásticos en general en el medio marino internacionalmente, pero en particular en la Antártida”, declaró Grossi antes de arribar al lugar.
“La iniciativa ‘Nutec Plastics’ es un programa para el estudio de la contaminación marina por plásticos que abarca casi todos los mares del mundo, excepto los antárticos. A través de este convenio, nuestro país extenderá este programa al continente blanco”, se remarcó en el documento oficial en el que se selló el acuerdo.